miércoles, 26 de mayo de 2010

MI ALMA DESBORDADA DE TI




¿Dónde estás brisa suave que mojas mi pecho rojo?
Y es mi sangre que fluye de este corazón enamorado
Dónde están tus huellas dónde tu risa dónde tus ojos
Dónde estás golondrina mia, dónde estás ave azul del cielo?

Ya no hay tristezas ni soledades en mis ojos grises,
Ya no más lamentos ni angustias existenciales,
Ya no hay más dolor ni temores ni vacíos ni angustias.

Las noches con sus sombras chinescas,
el tenue brillo de la luna filtrándose en mi lecho
no atemorizan mis sueños, ya no vierte el rocío,
de la mañana despuntando mi rostro endurecido.

Ahora soy feliz de andar caminos puros y limpios,
ya no mas tabernas, ya no mas ebriedad ni vicios.

Las noches de mortales caminos he dejado,
mi espíritu al albedrío va por nuevos caminos.
Tú nombre escribo con mi sangre roja de oxígeno,
has llegado, mujer sigilosa como la nieve,
como un copo de agua en mis manos,
como un ramillete de rocío de la esperada aurora
con los néctares dulces de tu boca y
exhalas vaporosos perfumes de tu cuerpo embriagador.

Así es ella, un ave de paso que encontró su camino,
en mi corazón encontró el nido y mi lecho.
Mi vida y la de ella ya no saben de tristezas y soledades.
Solo música cantos y manantiales y montañas y caminos y risas
Aire, vida, lluvia y fuego y belleza y volcanes y luces y oro.


JUAN ARROJAS



Nota: Un eterno agradecido querida amiga Amelia Salas 
           Por tu valiosa ayuda y sugerencias, el Autor

1 comentario:

amelia dijo...

Gracias a ti, poeta. Amelia